jueves, 10 de abril de 2008


En el último decenio del siglo XIV, el Rey Enrique III concede a la Adrada el rango de Villa, independizándola de la Ciudad de Ávila; junto con Arenas y Candeleda dona en 1395 al Condestable Ruy López Dávalos, para recompersarle su fidelidad, con ello pasa a formar parte del patrimonio de los nobles mas influyentes de Castilla, en un fiel reflejo de sus sucesivos auges y caídas. Según las menciones de la documentación conservada, ésta es la época en que, dada la categoría de sus propietarios la villa conoce un apogeo importante, siempre relacionado con monterías, cacerías y ocio de la aristocracia y de la corona.
Es posible que en éste momento se construyera el castillo, ya que las referencias a la presencia de Reyes, en épocas anteriores, Alfonso VI por ejemplo. Son sólo legendarias.
Situado sobre una colina en las afueras de la población, esta construido sobre una iglesia, de la que quedaron solamente vestigios.
A lo largo del siglo XX el castillo ha sido vendida en varias ocasiones, finalmente paso a propiedad Municipal y ha sido restaurado.

MUNICIPIO: La Adrada.
EMPLAZAMIENTO: En las afueras, dominando el paso de los ríos.
PROPIEDAD: Estatal.
ESTADO ACTUAL: Restaurado.
DESTINO: Actividades Culturales.
Integrado en declaración de Conjunto Histórico Artístico.

1 comentario:

cecilia davila dijo...

hola saludos escribo para decirles que me extraña que el apellido Del Risco no tenga escudo si es Español antiguo gracias
Cecilia